Las madres de Álex Didí Navarro Rodríguez y Liliana Arias Galvis esperan compartir la custodia de sus dos nietas, de 5 y 13 años, quienes quedaron huérfanas tras el trágico accidente que sufrieron sus padres el pasado martes de Carnaval.

Los familiares de los esposos llegaron en la mañana de hoy a la sede de Medicina Legal en Barranquilla para reclamar los cadáveres. Irónicamente, la pareja falleció al ser arrollada por un bus de servicio especial, que los acompañaba en la caravana de un sepelio. Ellos iban en una motocicleta Auteco Pulsar de color azul, que pertenecía a Navarro Rodríguez.

Álex y Liliana tenían cerca de 19 años de estar juntos. Su amor nació desde que tenían 16 años y desde entonces se fueron a vivir juntos. La muerte los alcanzó al mismo tiempo, como si no quisiera separarlos en el más allá.

“No quiero que a esos pelaos no me los separen ni en la tumba, porque ellos se querían desde jóvenes y ahora estarán juntos para siempre”, manifestó María Galvis, madre de Liliana, quien era oriunda de Cali y llevaba 33 años viviendo en Barranquilla.

Sepelio. Los esposos eran amigos de Deivy de Jesús Martínez Medina, asesinado el pasado domingo de cuatro disparos, por dos hombres desconocidos que lo ultimaron en la esquina de la calle 72 con carrera 22B, barrio Nueva Colombia.

Yomaira Rodríguez, madre de Álex Didí de 34 años, contó que debido a que la calle 84 estaba cerrada por el desfile de Joselito Carnaval, el cortejo fúnebre tuvo que desviar por el sector popularmente conocido como los toboganes, en el barrio Campo Alegre. “El bus se quedó sin frenos, ellos iban adelante y los golpearon, y a otras tres personas”, contó la mujer.

Los heridos son Maicol Borrero Ospino de 28 años, quien tiene traumas en diversas partes del cuerpo y una herida en el brazo derecho; Jorge Aldana Calderón de 22 años, quien también tiene politraumatismos, y un menor de edad con múltiples golpes.

Deseos de cambio. Los familiares de los fallecidos expresaron que ambos tenían deseos de cambiar la vida que llevaban. Es por eso que desde hacía más de un año, Liliana Arias, de 35 años, trabajaba con la Fundación Mujeres de Paz, un grupo que busca luchar por el bienestar de las niñas y de la comunidad en general. Además, la mujer de 35 años estaba estudiando enfermería porque “estaba concientizada de que las personas que no se capacitan no pueden salir adelante”, afirmó una compañera de la fundación.

Por su parte, Álex Didí Navarro, era oficial de albañilería y estaba en pro de conseguir una nueva casa en una zona diferente a la calle 73 con carrera 22B, donde habitaba. El motivo de esto, según contó un allegado, es que consideraba el barrio algo peligroso para que crecieran sus hijas.

Una nueva tragedia. Para Yomaira Rodríguez esta no es la primera vez que tiene que lidiar con la muerte de un hijo. De los cuatro que tuvo, el segundo y el tercero, Didí, encontraron su final de muerte violenta. En el año 2004, fue asesinado su hijo Jorge Luis Navarro.

“Los paramilitares llegaron a mi casa en el barrio Carlos Meisel y mataron a mi segundo hijo”, afirmó la mujer, que 13 años después debe enterrar a otro de sus hijos.

Los familiares de los fallecidos esperan ahora que se adelante una investigación para saber qué fue lo que sucedió con el bus de servicio especial y hacen un llamado para que los vehículos tengan revisiones técnicas para evitar que suceden más tragedias como la de Álex Didí y Liliana.